Después de mi primera critica en Triple A quería hacer un recorrido por algunas de mis series y capítulos favoritos, así que inmediatamente pensé que el siguiente debería ser Black Mirror, sin embargo, estuve pensando por un tiempo si la revisión/critica debería ser global u objetiva, es decir, si debería hacer una crítica de toda la serie o como lo que realmente es la serie, una conjunción de capítulos que se unen para formar un elemento global. Finalmente, me decidí por este último estilo, así que volví a recorrer los mejores capítulos y terminé decidiendo por éste.

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Black Mirror: Nosedive

Este es uno de los capítulos más claros y críticos de toda la serie, porque nos transporta a un mundo gobernado no sólo por la tecnología sino por la opinión que otros tienen de nosotros, un mundo donde todo gira en torno a la reputación que tenemos en una especie de red social que controla el nivel de aceptación de todos. Un nivel de aceptación que es aún más influyente que cualquier tipo de posición social o nivel económico. Básicamente la serie nos coloca en un mundo donde el estándar aceptado es totalmente controlado por el nivel de "influencia" que alguien logre desarrollar, un nivel de influencia que constantemente atenta con el razonamiento básico de las personas poniéndolas en situaciones obsesivas donde serán capaces de hacer cualquier cosa por aumentar su “puntaje” de aceptación. Todo el proceso de una mujer para mantenerse aceptada es realmente increíble, su constante obsesión por destacar y desligarse del resto es increíble porque nos pone en contacto con aquellas personas que sacrifican todo para mantener una fachada antes el público.

Esta es una crítica clara de lo que vemos actualmente en las redes sociales, donde mucha gente es aclamada por el poder de compromiso que poseen, sin importar quiénes sean realmente. Un poder de influencia que protegen más que su vida, porque básicamente vale más y por el que podrían hacer cualquier cosa.

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A lo largo del capítulo vemos cómo el mundo se ha vuelto totalmente artificial y plástico, lleno de cosas superficiales que gobiernan el comportamiento de las personas, nadie actúa intuitivamente y por el contrario todas las acciones están impulsadas por una especie de guion que hay que seguir para cuidar de su reputación. Un mundo que nos hará caer en el vacío si no tenemos una buena "reputación", hasta el punto de ser considerados criminales o parias. Sin embargo, también vemos la felicidad detrás de esa reputación, vemos lo que sucede cuando realmente comenzamos a vivir sin importar las etiquetas u opiniones de la gente.

Este es sin duda un capítulo que recomiendo ver, especialmente para aquellos que necesitan un poco de desprogramación de la influencia que las redes sociales tienen en sus vidas.

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