Neurópteros | Las crisopas y su importancia

Saludos estimados amigos de la comunidad de Hive en general. En la presente entrada estaré dando a conocer a un nuevo orden de insectos dentro de mi blog, específicamente el orden neuroptera. Los miembros del orden de los neurópteros quizás sean conocidos por muchos usuarios de esta plataforma, sobre todo aquellos que se dedican a labores agrícolas, ya sea por profesión o por aprendizaje, así que si quieres conocer un poco más sobre este tipo de insectos, te invito a que continúes leyendo el presente escrito.

^{Neuroptera, un orden de artrópodos eficaz dentro de la agricultura. Fotografías tomadas y editadas por el autor @abneagro.}

Dentro de los agroecosistemas o los espacios naturales, existe una amplia variedad de organismos que fungen como controladores por excelencia de muchas especies de seres vivos, gran parte de estos seres benéficos los encontramos en el mundo de los artrópodos, en este último punto entra el claro factor número, ya que este impresionante filo del reino animal está compuesto por los grupos más grandes (numéricamente hablando) de seres vivos. Por otra parte, también es entendible que dentro de dicho filo se encuentren la mayoría de invertebrados que resultan nocivos y molestos para la especie humana, muchos de ellos también entorpecen las diversas prácticas agronómicas empleadas para la obtención de alimentos.

En tal sentido, el componente profesional e investigativo especializado en las diversas ramas del campo agropecuario, se ha visto en la necesidad de buscar métodos para intentar frenar a las diversas especies de animales que tienen una alta probabilidad de transformar a sus poblaciones en plagas, empleándose para ello principalmente productos de origen químico que resultan ser eficaces hasta cierto punto, ya que este tipo de productos pueden resultar residuales y por lo tanto contaminantes; no obstante, también existen otros tipos de métodos que actualmente continúan en auge, tal es el caso del control biológico, en donde se suele usar al enemigo natural de la especie que afecta a los cultivos, con el claro propósito de regular poblaciones y minorizar el impacto negativo que estos producen.

En el mundo existe un amplia variedad de artrópodos empleados para controlar a otras poblaciones pertenecientes a este filo animal, tal es el caso de algunas familias del orden de los neurópteros, una de ellas son las populares crisopas, insectos que pertenecen a la familia chrysopidae y que serán descritas brevemente en el presente artículo.

^{Los crisópidos, el terror de los áfidos. Fotografías tomadas y editadas por el autor @abneagro.}

Los crisópidos constituyen la segunda familia más numerosa dentro del orden de los neurópteros, mismo que se caracteriza por el hecho de que las especies que componen al ya mencionado orden, poseen unas alas membranosas a las que se le aprecian con facilidad las nervaduras o venación en toda su extensión. La familia de los crisópidos está compuesta por 5 subfamilias, en ellas podemos encontrar diversos géneros que son de mucha utilidad dentro del control de plagas, tal es el caso del género Chrysoperla, aquí se ubica la especie que quizás sea la más popular dentro de este orden, me refiero a la Chrysoperla carnea, la cual ha sido una de las más estudiadas y puesta a prueba dentro de los agroecosistemas, teniendo resultados positivos en lo que respecta al control de poblaciones de áfidos, larvas de lepidópteros y otra amplia variedad de artrópodos de cuerpo blando.

^{Familia chrysopidae, especie Ceraeochrysa clauveri. Fotografías tomadas y editadas por el autor @abneagro.}

A pesar de que el género más popular sea el Chrysoperla, eso no le resta importancia a los demás, ya que las aproximadamente 1300 especies que conforman a la familia de los crisópidos, se caracterizan por ser depredadores naturales de muchas especies de artrópodos; una especie en particular que suele ser frecuente en rutáceas es la Ceraeochrysa clauveri, está especie se diferencia fácilmente debido a que posee en los laterales de la parte posterior de su tórax 2 franjas rojizas y al igual que sus primas, es un terror para diversos hemípteros como los pulgones o áfidos, Cabe destacar que los áfidos son de las plagas más frecuentes y completamente nocivas para las especies vegetales, sus poblaciones aumentan con facilidad ya que dependiendo de las condiciones, una hembra puede valerse del factor partenogénesis para reproducirse ante la ausencia de machos, en otro post tuve la oportunidad de hablar un poco sobre este tipo de insectos.

Por otro lado, los crisópidos son completamente inofensivos para el humano y otros animales de gran tamaño, no poseen ninguna toxina y tampoco poseen aguijón ni nada por el estilo, son insectos mandíbulados, pero ni siquiera su mordedura es dolorosa; sin embargo, la evolución les otorgo un mecanismo de defensa que suele ser útil en determinadas circunstancias, y es que, este tipo de insectos es capaz de producir y expulsar un olor que suele ser algo repulsivo cuando se manipulan, esta sustancia suele dejar impregnada la zona que entró en contacto con dicho artrópodo, pero es fácilmente eliminado con el uso de agua y algún jabón.

^{Partes de un crisópido adulto. Fotografías tomadas y editadas por el autor @abneagro.}

En esta serie de fotografías se aprecian las diversas partes que conforman a este invertebrado, observándose un cuerpo bastante alargado, específicamente su abdomen. Claramente las partes más llamativas de este insecto terminan siendo sus grandes ojos compuestos que con el reflejo lumínico suelen adquirir una tonalidad un poco dorada, y por otro lado están sus grandes alas, en sus alas se suele apreciar a simple vista su venación, por este motivo es el nombre que recibe dicho orden, el cual significa "alas con nervaduras".

Este tipo de organismo es de hábitos nocturnos, por lo que para tener mayor probabilidad de encontrarlos es recomendable buscarlos en dicho horario o en las primeras horas de la mañana, también son fácilmente atraídas por la luz en épocas de lluvia.

^{Larvas de crisópidos. Fotografías tomadas y editadas por el autor @abneagro}

Por otra parte, las crisopas son insectos holometábolos, lo que quiere decir que son de metamorfosis completa, tal cual como las mariposas o coleópteros. En sus etapas juveniles son larvas que realizan diversas mudas a medida que aumentan de tamaño, luego realizan una pupa o capullo y salen como un adulto en todo su esplendor. De igual manera, es en dichas etapas que los crisópidos son más eficaces como depredadores, ya que el adulto por lo general busca o se vale de otras fuentes de alimento como néctar e incluso polen, aunque también pueden continuar depredando a otras especies en menor medida.

Las larvas poseen un cuerpo alargado y algunas presentan áreas de su cuerpo más anchas, su forma y algunos hábitos en etapas tempranas varia según la especie; un ejemplo de esto son las larvas del género Ceraeochrysa, las cuales toman restos de materia orgánica, suciedad o partes de otros insectos, para realizar una especie de disfraz con el que suelen pasar desapercibidas ante depredadores o para infiltrarse dentro de los grupos de otros insectos. Asimismo, muchas veces tienden a confundirse con algunas especies de cocoideos, debido a que este tipo de hemípteros realizan estructuras blanquecinas similares, la forma más práctica de diferenciarlas es por la movilidad, las larvas de este tipo de crisopas son de movimientos rápidos, mientras que una cochinilla (cocoideo) es de poca movilidad. A su vez, cabe destacar que las larvas de crisopas a pesar de parecer que poseen una poderosa mandíbula, en realidad son herramientas que emplean para perforar el cuerpo de sus presas y estas fungen como inyectadoras o sorbetes con los que succionan los fluidos de sus víctimas.

^{Crisopas y sus huevecillos. Fotografías tomadas y editadas por el autor @abneagro}

Los neurópteros tienen la particularidad de que sus huevecillos suelen colocarlos en la punta de un fino pedúnculo de seda, gracias a esta táctica mantienen a salvo a sus huevos de los depredadores. Asimismo, como se aprecia en la fotografía, estos huevos pueden ser colocados en cualquier superficie, por lo que es probable que en algún momento de tu vida los hayas visto en algún lugar, incluso dentro de nuestros hogares. Los huevos suelen ser inicialmente blanquecinos, posteriormente se van oscureciendo con el paso de los días, estos pueden ser colocados de manera individual o en pequeños grupos.

En lo que respecta al manejo de plagas, estas especies son reproducidas a nivel de laboratorio con la finalidad de ser empleadas en agroecosistemas, mientras permanecen en estos lugares suelen ser alimentadas con sustancias azucaradas, una vez que colocan los huevos, estos son removidos con pinceles y puestos en un nuevo recipiente, de esta manera pueden ser reproducidas en cantidades notables para ser liberadas cuando se determine el momento correcto. Como pueden apreciar, estas especies son vitales para mantener un equilibrio natural dentro de los ecosistemas terrestres, el uso de agroquímicos de manera incorrecta puede desequilibrar las balanzas naturales y hacer proliferar a algún artrópodo, por lo que este podría convertirse en una amenaza latente. Un crisópido es por lo general muy común en pequeños huertos, por lo que la importancia del presente post radica en demostrar que este insecto no representa peligro alguno para nosotros, al contrario, puede sernos más útil de lo que pensamos.

¡Gracias por leer!

Todas las fotografías empleadas en este artículo pertenecen al autor @abneagro, el material fotográfico fue realizado con un dispositivo móvil ZTE caribe 4 y editadas con la aplicación canva.