Ácaro Hindú - Una enfermedad relativamente nueva

Los cultivos agrícolas sobre todo aquellos frutales perennes, cuando ya han pasado un determinado tiempo en un sector se naturalizan, es decir que se radican en el área, se estabilizan y el medio que les rodea se adapta a esta nueva normalidad. Esta nueva biota compuesta por múltiples organismos genera una regularidad en los ciclos biológicos, generando nichos tanto de insectos benéficos como dañinos, colonias de hongos y bacterias, y el resultado de estas interacciones entre los distintos organismos influirá directamente sobre el cultivo e incluso sobre el desarrollo y adaptación de las especies locales.

Cuando cierta normalidad se ha establecido en un área, se vuelve algo mas fácil de conocer e identificar los distintos eventos que ocurren periódicamente en los cultivos. Una vez se vuelve familiar los patrones de crecimiento, los daños en los cultivos, las diferencias entre una plaga y otra, cuando se hace presente un nuevo tipo de daño se identifica casi que al instante.

Tal es el caso para estos frutos de limón persa, los cuales presentan unas manchas blancas circulares, las cuales bien podrían tratarse de una reacción química al mezclarse fertilizantes foliares quelatados con azufre, reacciones de insecticidas adherentes con productos fertilizantes foliares ricos en calcio o quemaduras químicas causadas por algún herbicida (suele suceder cuando los equipos no son higienizados correctamente).

Limón con manchas atípicas en su piel

Pero, si este tipo de manchas aparecen no solo en frutos sino también en hojas y presenta cierto tipo de patrón en los daños ocasionados, es hora de analizar otras posibilidades, una de ellas es la de estar presente ante el ataque de hongos o ácaros, en especifico el Schizotetranychus hindustanicus mejor conocido como ácaro hindú.

Este ácaro actualmente no se ha esparcido por toda América, siendo reportado hasta el momento solo en ciertos sectores de Colombia, estos ácaros de tipo fitófago han representado un problema fitosanitario de interés económico, pues reducen los niveles de producción e inciden directamente en el desarrollo de los frutos.

Los organismos de tipo fitófago como los ácaros representan dos problemas, ya que sus hábitos alimenticios los hace generadores de daños en el tejido vegetal de hojas y frutos, al mismo tiempo que son vectores de virus y enfermedades. Estos arácnidos pueden adaptarse a distintas especies de cítricos sin afectar sus ciclos de vida ni sus ciclos reproductivos

Para el control de estos arácnidos se pueden utilizar insecticidas de amplio espectro pero esto solo si no hay plantas en etapa de floración pues algunos polinizadores se verán afectados en la aspersión de estos insecticidas.

Observación: Existen miles de especies de ácaros, algunos son controlados por insecticidas de amplio espectro, mientras que existen otros especímenes con variaciones en su aparato bucal y su taxonomía y requieren insecticidas específicos.

Si la planta se encuentra en producción y ya los frutos están alcanzado el tiempo de cosecha es recomendable aplicar extractos de Neem en lugar de insecticidas para evitar la cosecha de frutos contaminados, la eficacia de este extracto ha sido probada satisfactoriamente y es un controlador natural no solo de ácaros sino que también evita la proliferación de hongos gracias a sus metabolitos secundarios y puede ser aplicado en cualquier momento de desarrollo de la planta en combinación con otros productos.

Material fotográfico facilitado por el productor en una consulta técnica en línea

El resultado de dicha consulta son conjeturas basadas en experiencia y conocimientos previos que le sirven a la persona de guía

Fuentes bibliográficas
Ácaro hindú