Química aplicada //Procesos tecnológicos en la detención de alteraciones de glúcidos

Bienvenidos estimados miembros de esta prestigiosa plataforma, sirva la presente publicación como mecanismo de abordaje que permita la compresión de un conjunto de procesos tecnológicos con aportaciones científicas que ha logrados identificar sustancias toxicas que atentan contra la calidad de los productos.

Como ha sido constante en mi estadía en la cadena bloques #Hive, este tipo de contenido suelo compartirlo a través de la comunidad de @cervantes quienes se han mantenido a la vanguardia de tópicos de interés científico y adelantos tecnológicos.

Por consiguiente, centraremos nuestra atención en una mezcla de glúcidos de mayor importación, debido a sus propiedades curativas y alimenticias, el cual conocemos con el nombre de miel, estas sustancias se obtiene por un arduo trabajo de las abejas del genero Apis, el producto es un procesado a partir del néctar de las flores que al ser combinadas con sustancias deshidratadas y almacenadas en los paneles de maduración de los panales da origen a este líquido viscoso tan demandado por la sociedad.

Químicamente la sustancias en una mezcla de carbohidratos de tipo mono y disacáridos entre los que destacan la glucosa y la fructosa de igual forma se encuentran trazas de isomaltosa, maltosa, turanosas entre otros, estos compuesto en presencia de enzima del tipo amilasa y catalasa más el agregados de vitaminas le proporciona las propiedades específicas de la miel.

Sin duda el producto cuenta con una serie de características que lo hacen atractivo y altamente demandado y es esta demanda la que ha dado pie para que el mismo sufra modificaciones que atentan contra su calidad. En este sentido, mediante esta publicación centraremos nuestra atención en el análisis de procesos tecnológicos que se han desarrollo y que permite identificar edulcorantes externos que se han agregado al producto que hoy estudiamos.

Par logra este cometido, nos apoyaremos en la tecnología implementada en la Universidad de Cádiz, donde un grupo de investigadores han logrado desarrollar un sofisticado mecanismo al cual ha denominado “Nariz electrónica” que permite analizar la composición química de las sustancias y determinar las variaciones que han sufrido estas.

Dicha inventiva se aplica actualmente en aeropuertos para identificar drogas, así como en la identificación de posibles materiales explosivos. El proceso va orientado en la identificación de mezclas mediante un dispositivo altamente sensible, que detecta las variaciones del producto y los comparar con datos recogidos previamente y almacenado en su red de registro.

Si hacemos una revisión a profundidades nos damos cuente que el dispositivo, no es más que un proceso químico que genera una separaciones iónica en fase gaseosa, para ello los compuestos volátiles terminan haciendo un recorrido a lo largo del dispositivo, donde interactúan con corrientes magnéticas que les permiten cargarlos de forma positiva o negativas y en función a la carga, tamaño y forma de ión, se emite una señal que el dispositivo codifica en función a su base de dato.

En opinión María Aliaño, investigadora activa del proyecto:

Un ejemplo práctico de lo anterior, se vislumbra en el tratamiento de la miel, la misma arroja iones que demoran 1900 milisegundo en hacer los recorridos, sin embargo, estos iones al ser adulterados manifiestan una variación de 1350, lo que arrojas datos reales del nivel de adulteraciones que pueda presentar el producto.

Si bien resulta oportuno cuestionarnos sobre la importancia del estudio, es necesario resaltar que en países como España, esta rotundamente prohibido la adulteraciones de la miel, debido a los diferentes usos que se le da al producto, quizás en los países Sudamericanos no les demos la importancia necesaria, pero debemos ser consiente que cualquier modificación puede representar una amenaza sobre la salud de la población que la consume, de allí la necesidad de socializar esta información.

Sin duda, existen diferentes métodos aplicados en la detección de las adulteraciones de las sustancias, donde las técnicas más empleadas son, la espectroscopia infrarroja una técnica de uso común en el análisis de los alimentos, sin embargo la espectrometría de movilidad iónica ha generado una efectividad del 100% en la detección de sustancias ajenas al producto objetos de estudio, estadísticas que se debe a la sensibilidad de la técnica la misma permite detectar trazas en PPM o partes por millón del producto invasor.

En este sentido, si te ha parecido oportuna esta información te invito a dejar tu aporte en la sección de comentario.

[1] Chang, R. (2010). Química. Decima edición. McGraw-hill Interamericana editores. ISBN: 978-607-15-0307-7.

[2] Carmen Rico, Jorge O. Cáceres. Adulteración de Miel: Estado Actual y nuevas técnicas de Análisis. Article: Online Access

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