O una basura… Pero todos los procesadores son distintos, incluso los que comparten el mismo modelo. Aunque salgan de la misma matriz! Pero… ¿Por qué?

Los procesadores están hechos fundamentalmente de silicio, un conductor que abunda en la naturaleza. Se extrae de la arena, se funde junto con carbón a alta temperatura. El resultado son enormes rollos de cristal de silicio. Estos rollos luego se cortan en fetas, si, como si fuera un pedazo de jamón y luego se pulen con varios métodos hasta conseguir una superficie prístina.

En él se imprimen los circui procesadores. El circuito se “dibuja” en la superficie. Digo dibujar entre comillas porque el proceso es bastante curioso. Se llama fotolitografía.

La fotolitografia consiste en bañar la superficie con una sustancia que reacciona a la luz y luego iluminar. Aparte de ser fotosensible, conduce electricidad. La precisión es tal que se colocan capas de esta pintura conductora fotosensible una arriba de la otra con nuevos dibujos. Esto permite enormes cantidades de procesos en simultáneo en un espacio ínfimo.

El proceso de purificación de silicio es bastante complejo y fue evolucionando con los años. Pero el proceso no siempre tiene un resultado idéntico. Y me refiero a idéntico, porque a la escala que estamos hablando impurezas a nivel microscópico tienen un gran impacto en factores como rendimiento y temperatura.

Todos escuchamos que los procesadores están divididos en generaciones (su edad), modelos(sus prestaciones) y arquitecturas que es básicamente el diseño. Bueno, las arquitecturas son compartidas en diferentes modelos de la misma generación. Se diferencian justamente de sus impurezas. La "suciedad" o micro fracturas en la planchuela de silicio hace que a fines prácticos, ciertos núcleos no funcionen, o que al alcanzar cierta velocidad se caliente o se torne inestable. Entonces estos sectores se eliminan físicamente o su velocidad se limita para que funcione correctamente. Esto crea los diferentes modelos en los procesadores de la misma familia.

Este fenómeno que les comenté se llama en la jerga "ruleta del silicio" ya que cuando compramos nuestro procesador tenemos la posibilidad de que sus prestaciones sean superiores (aunque nunca serán inferiores)

Es un proceso que me pareció exquisito. Parece la fusión entre artesanía y ciencia, un uso extraordinario de la luz para conseguir algo tan maravilloso y preciso como un procesador. Tecnología que hace ya mas de 50 años alimenta la informática moderna.