En una oportunidad, en la que subí a una montaña cercana a mi casa, capturé fotografías y videos de cactus del género Cereus, y posteriormente escribí algo sobre generalidades de esos cactus. En otra oportunidad, en la que subí a la misma montaña, encontré de nuevo cactus del género Cereus, pero a diferencia de la vez anterior, los cactus tenían frutos y les capturé fotografías y videos (hice un video compilado) que son los que muestro a continuación.

Aclaro, que sobre el género Cereus se ha documentado que incluye alrededor de 33 especies. No obstante, en la base de datos del Sistema Global de Información sobre Biodiversidad (the Global Biodiversity Information Facility, GBIF por sus siglas en inglés) aparecen 308 especies, muchas de ellas marcadas como dudosas por diversas razones, por ejemplo, el nombre científico es una especie o una infraespecie con un género o especie parental considerado como sinónimo. Asimismo, existe un caso en el que la especie Cereus jamacaru se cruzó con la especie Cereus peruvianus, demostrando que las dos pueden polinizarse mutuamente y producir plantas, y aunque esto no indicó que se tratara de la misma especie, se cree que Cereus jamacaru podría ser una subespecie de Cereus peruvianus. El nombre científico Cereus peruvianus con frecuencia se utiliza erróneamente, y se considera como sinónimo de Cereus repandus. La especie que muestro es probable que sea Cereus hexagonus, sin embargo, a veces es confundido con la especie Cereus lepidotus, que con frecuencia se asumen como sinónimos. A menudo, Cereus hexagonus se identifica erróneamente como Cereus repandus.

Entre frutos de especies de Cereus, los de Cereus peruvianus comienzan a desarrollarse tras la polinización con polen compatible. La primera etapa es un período de crecimiento rápido de aproximadamente 15 días, seguido de un período de crecimiento más lento de unos 10 días, al que sigue otro período de crecimiento rápido hasta la maduración completa. Los frutos alcanzan su masa máxima entre 45 y 50 días después de la antesis, es decir, después de que las plantas florecen. El primer color aparece después de aproximadamente 35 días, mientras que el color completo lo alcanzan entre los 45 y 50 días después de la antesis.

Antes de la maduración los frutos son verdes, luego cambian su color a violeta donde la clorofila y las betalaínas, que son pigmentos rojos, existen juntos. A medida que la clorofila desaparece, el color cambia a un rojo intenso y la piel del fruto se estira y se vuelve lisa.

Las semillas se desarrollan principalmente durante la segunda etapa; cuando la tasa de crecimiento es más lenta. Después de esta etapa, las semillas tienen una cubierta negra dura y pueden germinar. Al final de la fase de desarrollo del fruto (entre 45 y 50 días), más del 95 % de los frutos empiezan a abrirse y agrietarse para exponer sus semillas, porque en ellos ocurre la dehiscencia, que es precisamente, la acción de abrirse naturalmente el pericarpio de un fruto, para dar salida a las semillas. Es de hacer notar, que si los frutos se recolectan en las primeras etapas de su desarrollo, da lugar a frutos no comestibles y poco sabrosos, por lo que, para conseguir un sabor razonable, deben ser recolectados en torno a la fase de pleno color, en la que la mayoría se agrietan.

La mejor calidad para el consumo se alcanza cuando los frutos están completamente rojos; sin embargo, como en la mayoría aparecen grietas, lo recomendable es recolectar los frutos cuando aún queda algo de violeta y la piel está completamente estirada. Cuando los frutos se almacenan a 10 ºC, la vida útil es de más de un mes. Si se reduce la temperatura de almacenamiento a 4 ºC, se producen graves daños por frío, como arrugamiento y ennegrecimiento de la piel, pulpa acuosa y mal sabor.

Con relación a sus componentes químicos, los frutos de Cereus peruvianus poseen un contenido de agua de aproximadamente 85 %, son frutos ricos en fibra (mucílagos compuestos de polisacáridos) y bajos en azúcares. Antes de la maduración de los frutos, el contenido en polisacáridos disminuye al mismo tiempo que aumentan los azúcares solubles. Los principales azúcares son la glucosa y la fructosa, con trazas de sacarosa. Durante la maduración, el ácido principal es el málico, seguido de los ácidos cítrico, oxálico y succínico. Debido a su bajo contenido en azúcares, los frutos suelen recomendarse a los diabéticos. Cabe destacar, que los frutos emiten un olor perfumado único, y análisis de compuestos volátiles han mostrado que el componente principal es el linalool y sus derivados, y cuando se deja que los frutos alcancen su plena madurez en almacenamiento, la cantidad de linalool puede llegar a ser 17 veces mayor que en los frutos agrietados maduros en las plantas.

Cabe comentar que en las flores, la dehiscencia de las anteras, que provoca la liberación de los granos de polen, tiene lugar alrededor de las 7:00 p. m., hora en que las flores se abren unos minutos antes de la puesta del sol, por lo que el tiempo para la visita de las abejas es muy limitado y casi no se produce la polinización. Tras la salida del sol, las abejas y otros insectos diurnos visitan las flores, pero la flor es demasiado grande para que estos insectos realicen una polinización eficaz. En la naturaleza, la polinización la realizan insectos grandes e incluso murciélagos frugívoros.

Por otro lado, en el caso de la especie Cereus hexagonus, la duración de la floración puede variar de 2 a 4 meses, y polillas nocturnas de la familia Sphingidae pueden ser polinizadoras. La formación del fruto que es ovoide, hace que la flor pierda restos del perianto (cáliz y corola) a través de una cicatriz circular. En estos frutos ocurre una dehiscencia tardía a través de una o dos hendiduras laterales que miden 6,0 × 4,5-5,0 centímetros. El pericarpio del fruto es liso y de color rosa suave a rosa intenso, con pulpa blanca que contiene semillas que miden de 2,0 a 2,2 milímetros de largo, con forma obovada, negruzca y brillante.

En el paso de frutos en desarrollo a frutos maduros, la especie Cereus hexagonus puede alcanzar un porcentaje de pérdidas de hasta un 60 %. Entre las aves que consumen sus frutos se encuentran las especies Thamnophilus punctatus y Thraupis palmarum.

Cabe resaltar, que dentro de las flores de Cereus hexagonus, se han encontrado en abundancia coleópteros de la familia Staphylinidae con sus larvas, y la baja movilidad de estos escarabajos en las flores de Cereus hexagonus, ha sugerido que están asociados con la depredación de polen.

Los cactus con sus frutos se pueden ver en video.

También existe un video compilado de cactus del género Cereus que encontré en la misma montaña.